Mentalidad imparable de un networker

Porque sí, los networkers tenemos que pensar de forma imparable. Como diría  Alicia de Tim Burton “Suelo pensar en seis imposibilidades antes de empezar el día”.

Ser un networker conlleva tener un perfil bastante específico, trabajando mucho en la personalidad y mentalidad.

Así, podemos decir que la mentalidad es un conjunto de costumbres y creencias que engloban un modo de pensar, y que caracterizan a una persona, un pueblo o toda una generación. 

Ahora bien, dentro de las sociedades tenemos similitudes entre las mentalidades, pero la mentalidad de un networker tiene que ser bastante particular.

¿Por qué? Un networker debe pensar como un emprendedor, puesto que está trabajando en un modelo de negocio distinto al modelo tradicional, por lo que tienen que atreverse a tomar riesgos, que quizás no siempre funcionen como espere, pero que sepa manejar una actitud positiva que lo haga levantarse y no rendirse.

Mentalidad imparable 

Esta cualidad es esencial, ya que sabe que el fracaso es un mero aprendizaje y que esto no debe detenerlo sino más bien impulsarlo: ser imparable.

Al trabajar en ventas, y sobre todo al introducir un producto nuevo al mercado, hay que saber cómo hacer que el cliente conecte con el artículo o servicio, hacer que lo necesite en su vida, y para eso se debe ser muy creativo.

Dependiendo de lo que se va a vender, hay que innovar en la forma de venderlo, (no todas las estrategias funcionan para todos los productos) las palabras que se dirán, qué estrategia se aplicará para poder llegar al cliente más rápido.

Todo esto conlleva dedicación y entrega, que en el modelo de ventas tradicional no siempre aplica. Un networker tiene que pensar siempre outside the box.

Mentalidad imparable 

Pero aunque se dominen las ventas y la estrategias aplicadas, lo que hace imparable a un networker no es tanto su marketing, sino su equipo de trabajo, su red.

Este es su enfoque primordial, ya que solo llegas más rápido, pero acompañado llegas más lejos, y esto un networker debe saberlo, aplicarlo y tenerlo como un mantra.

Motivar a su equipo y beneficiar a todos los eslabones es fundamental, porque al final del día importa el crecimiento personal que tiene cada miembro de una red: desde el networker principal, hasta el más nuevo integrante del equipo.

Un networker imparable es aquel al que le apasiona lo que hace, y se entrega a ello, con el fin de lograr sus metas y sueños. Y tomar acción desde ya, sin esperar que nadie trabaje por ti.

Al igual que rodearte de gente que piense de la misma manera, crecer juntos es fundamental.

En conclusión, todo se hace con pasión, o no se hace. Y lo más importante de un networker es su actitud y sus ganas de enfrentar la vida y ponerle sus reglas en beneficio de un bien común.

Incentivar el desarrollo personal de todos y cada uno de su equipo de trabajo y ver como los resultados llegan solos, casi sin darse cuenta, porque al final del día la satisfacción personal será enorme.

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Éxitos en todos tus Emprendimientos, 

Mentalidad imparable